Menuda la que se ha montado con el tesoro submarino descubierto por el Odyssey, uno de los más grandes jamás encontrado. España, como ya había advertido, ha demandado a la empresa de cazatesoros con afán de recuperar lo que es suyo, lo que nuestro. Y los norteamericanos, mal disimulados ellos, se niegan a decir donde encontraron semejante botín.
Hay que tener en cuenta un par de puntos: primero, que el Odyssey pidió permiso a España para investigar nuestros fondos marinos, licencia que el país concedió; segundo, que la ley española obliga a entregar el tesoro, lo encuentres donde lo encuentres, al Estado. Si yo encuentro una moneda de plata en un parque público, estoy obligado por ley a entregársela a las autoridades; pero si la moneda, o lo que sea, la encuentro en el jardín de mi propia casa... ¡ah, se siente! También estoy obligado a entregárselo al Estado. Justicia divina o injusticia estatal, lo que prefieran los señores.
Soy contrario a esa ley, de veras: lo único que provoca es que todo lo que uno encuentra se lo calle como un muerto por no arriesgarse a perderlo. Y si el Estado se entera, te lo quita y encima te puede caer una buena. ¿Qué hacen con tantas reliquias? Algunas van a museos, sí, pero el mayor porcentaje va a almacenes. ¿Por qué iba a estar mejor en una caja que en el salón de mi casa?
España juega sucio con Odyssey: saben que son cazatesoros, les dejan que barran los mares en busca de fortunas y cuando las encuentran, pretenden arrebatárselas. Normal que Odyssey, que se ha gastado un dineral en su investigación, se niegue a revelar el origen de tan suculento premio. Pero quien calla otorga, claro.
¿Que no estamos dispuestos a que nos quiten nuestros tesoros? Adelante, perfecto: pues gastémonos en inversión y busquemos nosotros mismos los galeones hundidos. No concedamos licencias a terceros países para que los encuentren y luego nos los quedamos nosotros. No nos convirtamos en un país de miserables, de esos que pretenden tenerlo todo sin gastarse un duro, a costa del trabajo de los demás.
Un tesoro con dos dueños
jueves, 31 de mayo de 2007
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10 comentarios:
Hombre, visto así...somos un poco aprovechados, sí, pero, oye, aquí el que no corre vuela. Deberíamos buscar nuestros tesoros nosotros, pero está claro que no estamos para esos lujos, así que si los busca otro, pues nos aprovechamos. ¿Qué quieres? Es el espíritu español.
Por otro lado, ¿no sabián aquí mis amigos los cazatesoros que si encontraban algo no iba a ser para ellos? Que se informen de la legislación del país antes de ponerse a rebuscar.
Claro que lo debían saber: precisamente por eso se niegan a decir dónde han encontrado el tesoro.
Pero si hubiese sido una empresa española en aguas venezolanas, criticaríamos a Chávez por quitarnos el tesoro, ¿verdad?
Mira que, por lo general, me caen mal los americanos, pero cuando nos la juegan bien, hay que reconocerlo. Nos piden permiso y lo encuentran... ¡pues para ellos!
Seguro que la próxima vez somos más listos...
El tema este es como el de la investigación: todos los investigadores españoles fuera de España porque España no paga un puto duro. Así que así nos va la vida.
Yo desde luego si me lo hubiera encontrado no habría dicho ni mu. Lo hubiera vendido por ahí en algún mercado negro y a vivir la vida que son dos días... se lo iba a dar al estado por que sí, jajajaja.
Jajajaja si hubiera sido una empresa española en cualquier parte critícaríamos a quien fuera por quitarnos el tesoro. La historia es que sí, es injusto, pero es la única forma que tenemos de conseguir tesoros, porque nuestros presupuestos no dan para más. Pero es que si yo fuera buscador de tesoros, o no me pondría a buscar donde sé que lo que encuentre no me lo voy a poder quedar, o no diría que he encontrado nada, no sé, hay que tener un poco de sentido común.
España tiene buenos presupuestos. ¡Otra cosa es que se destinen a otras cosas! Pero no somos un país pobre. Lo que sí somos es derrochador para las tonterías (y ahí señalo al PSOE y PP, que mande quien mande siempre pasa lo mismo).
No sé que nos ha dado con el mar, que nos queremos hacer con todo: tesoritos, medusas (¡deprisa! ¡Sacad todos el teléfono móvil!), barcos llenos de inmigrantes… ¿Será la borrachera de banderitas azules?
Tenemos buenos presupuestos, si. Derrochamos mucho, también. Pero aún así no tenemos como para ponernos a mirar en las profundidades marinas en busca de tesoros.
Bueno en realidad según la ley española nos corresponde un 50%, es decir, no le quitamos todo. Y supongo que Odyssey sabía cuando pidió permiso al gobierno lo que debía hacer si encontraba algo.
estoy de acuerdo con Babieña, nos corresponde un 50%, y otro 50% al que lo encuentra, pero no estoy segura de esa regla se aplica también al patrimonio histórico y cultural.Pero sería lo más justo.En cualquier caso, para una vez que tenemos razón espero que los americanos se apliquen el dicho de "ajo y agua" ya que al pedirnos permiso para investigar acogen a nuestra ley y tienen que aceptarla.Ellos se llevan mas cosas aparte de dinero con esto.
Al margen de esto estoy 100% de acuerdo con el problema de España y la investigación...
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