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Educación y modales

Detesto caminar por una calle y tener que pararme a saludar a alguien que me es indiferente. Preguntarle cómo le va la carrera, que tal su familia, cómo le va la vida. Me parece tan falso que sencillamente me ahorro todo el paripé y paso de largo con la mirada clavada al frente o mirando disimuladamente la pantalla del iPod como si estuviese buscando una canción. Sé que quedo como un maleducado, pero ¿y qué? Prefiero maleducado a hipócrita. Porque me importa un comino lo que le ocurra con su vida.
Cuando pasé a 1º de E.S.O. mis padres decidieron cambiarme a otro colegio, donde pasé seis años hasta entrar a la universidad. Será porque yo apenas he cambiado o porque conservo a siete (mas uno) de los amigos de primaria, pero ocurre con demasiada frecuencia que nos encontramos con alguien con quien no hablo desde hace años y me dice: "¡Cuanto tiempo!". Y yo, que lo paso fatal en estas situaciones, soy lo más seco y cortante del planeta Tierra. Tanto que la persona en cuestión acaba por hartarse y sigue a su rollo, que a mí me den morcillas. Y en un rincón de mi ser mi yo interior me dice "qué maleducado eres" pero el otro yo, al que hago caso, argumenta: "Si de verdad os importaseis no hubieseis dejado de ser amigos". Como soy como soy le doy la razón al segundo, que ese no me hace sentir culpable.
Diciendo esto puede parecer que soy la persona más grosera del mundo, pero tampoco es cierto. Tengo buenos modales, trato a la gente con respeto y nunca olvido pedir las cosas por favor y decir gracias. Tanto, que alguna amiga me dice que soy exagerado con tantos modales. Ahora que lo pienso, no solo lo dice ella, también lo dicen otros. Pues bueno. Los modales no me hacen sentir hipócrita, por eso los prefiero a la falsa educación.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

yo odio tener que saludar a aesa gente, es igual que cunado de pequeña me obligaban a darle un beso a todo el mundo cuando ibamos al pueblo, y a mi no me apetecia y me escondia detras de mi madre, no me apetecia por que no le tenia cariño a esas personas que muchas veces ni conocia.
ahora cuando veo de lejos a alguien hago como que busco algo en el bolso o como que envio un sms y no lo considero una groseria, ni una falta de educacion, simplemente no hay ganas de contarle mi vida a alguien uqe no le interesara lo mas minimo, y que no me cuente su vida que tampoco me importa.
lo del ipod todavia no o he hecho lo provare.
besitos ciaito!

Anónimo dijo...

Arrgg!! Totalmente de acuerdo! Lo de encontrarse gente por la calle y lo de las típicas llamadas por compromiso que uno recibe el día de su cumpleaños… ufff. Encima que odio hablar por teléfono, tengo que hacerlo con gente que me importa nada y menos y sobre cosas absurdas (y repetir lo mismo 20 veces durante todo el día). No me gusta hablar del tiempo ni los silencios incómodos, prefiero hacerme la loca. Luego la gente me dice que soy rancia y arisca, pero yo por las noches duermo igual de bien :P

Nazaret dijo...

Por primera vez estaba leyendo algo totalmente embobada y sintiéndome plenamente identificada.
Pero yo no uso el iPod, uso el móvil, que mola más.

En serio, hay veces que te cruzas con el amigo de la infancia que llevas años sin ver, y depende también cómo fuera la relación, pasas de saludar o te quedas con el típico "hola".

Malo ya cuando te lo encuentras de borrachera o de fiesta, entonces al final acabas tragando (más que nada porque en esos estados de alteración de la conciencia no puedes hacer otra cosa).

Es una de las razones por las que no me gusta andar por la calle tranquilamente (por mi pueblo, entiéndase). Porque no me gusta estar parándome a cada segundo a saludar a alguien de quien ni siquiera me acordaba. Al final miro para otro lado o suelto un "hasta luego". Y para mi no es bordería, es ver las cosas tal y como son. ¿Perder el tiempo en alguien que pasa de perderlo contigo? Pa' qué.

Lol dijo...

bueno, todos nos sentimos asi.A mi mi yo interior me dice por un lado "qué rollo...que poco fuste" pero el otro no me dice que si no somos amigos es porque no nos importamos, si no que me da pena no tener tiempo para cultivar todas las amistades que quisiera (ni yo ni la otra persona), es triste pero a los amigos hay que dedicarles, tiempo ganas y energia.

Con algunos estamos conectados a un nivel tan íntimo que no hace falta.Pero son la minoría

Casillas95 dijo...

Yo les levanto la ceja, y con eso se supone que ya los he saludado, ¿No? Total, para lo que ciertas personas han hecho por mi, te juro que ni se merecen ese saludo. Luego está mi familia, que me dejan el muerto, que si saluda a este, que si habla con este, que si llama al otro...de apetecerme poco, la verdad. Seré seca, lo reconozco, pero con quién quiero, y si una persona se ha portado bien conmigo o simplemente no me ha hecho nada malo, va a tener un buen saludo por mi parte, también soy muy rencorosa, perdono pero no olvido. Así que si alguien me hace algo que no me siente bien que espere sentado mi cordial saludo.

Anónimo dijo...

Yo soy de las que disfruto enormemente cuando se me cruza algún conocido y reacciona así. ¿Por qué? te preguntarás... Bueno, peco de ser exageradamente sentimental y me cuesta mucho ser indiferente a alguien que haya pasado por mi vida, aunque su presencia haya sido efímera, y considero que al menos merecen dos segundos de mi tiempo, suficiente como para decir "te vi, ahí estás :D". Pero sigo sin explicar porque disfruto cuando alguien no me saluda ¿no? La cuestión es así, cuando eso me pasa me siento mal (debido al sentimentalismo previamente explicado) y surge en mi un deseo vengativo (si, vengativo, porque además quiero que se sientan mal) de hacerles entender que no hace falta que me dediquen cuatro horas a escuchar lo rutilante (o no) que es mi vida, que obviamente no voy a contarles cuales son mis preocupaciones más profundas, y es más, ni siquiera voy a comentar sobre el clima. ¿Y cómo procedo para tal fin? El primer paso es llamar su atención, de la forma más excesiva posible, cosa que no puedan pasarlo por alto, si tengo que recurrir al ridículo, lo hago con gusto. Lo que sigue es plantarle un beso en la mejilla, bien ruidoso, mientras suelto la siguiente frase "Qué lindo encontrarte, lástima que no tenga tiempo para charlar pero estoy apuradísima. Lo que es la vida moderna ¿eh?. Bueno, que sigas bien. Chau!!! :D" Lo más importante es que el otro no tenga tiempo a decir nada y se quede pensando "¿Qué carajo acaba de pasar?". Después de eso, continuo mi rumbo con paso apurado, que seguramente amenguaré una o dos calles adelante, deseando que mi maniobra haya sido exitosa mientras canto por lo bajo "volver".

C. (@el_croni) dijo...

tu comentario me ha recordado al Cortazar que conocí por una buena amiga, Penny.

Anónimo dijo...

La cortesía es fundamental, lástima que no esté de moda... favorece tanto la convivencia..

Y sí, la capacidad de aguantar pesados es algo que se va perdiendo con la edad, pero no es falta de educación.

Anónimo dijo...

¿¡¿¡Siete (más uno)!?!? Venga ya...

C. (@el_croni) dijo...

Con ese más uno me refiero a alguien que es amiga pero que no venía a mi clase de Primaria. Mentiría si dijese que conservo su amistad desde entonces, porque entonces no nos conocíamos.

Claro que tú habrás pensado en otra cosa :P

Helena dijo...

A mi me divierte saludar a los conocidos de forma hipócrita. Es tan tan absurdo que me da risa, la verdad. Sobre todo con aquella gente que me hacía la vida imposible hasta hace dos días. "¿Qué tal?" me dicen. Quieren que les responde "Fatal", pero no les doy ese placer, levanto la cabeza y que se enteren de que yo no guardo rencor a nadie. En serio, yo me río. Hay que echarle humor a la vida.

Anónimo dijo...

Eso me pasa tambien, es bastante cierto. Pero tambien es cierto que con un simple saludo podés recuperar a una persona que, en su momento, por x o por y no pegaron onda. Me pasó varias veces y soy felíz de esa cualidad de amable acérrimo que tengo. De todos modos suelo "hacerme el boludo" varias veces con ciertas personas.

Claro que tambien me vale de situaciones como ayer, cuando por "quedar bien" con una persona a la que creí conocer, me terminaron robando ¬¬

En fin...